Centenares de personas acudieron hoy al sepelio de la cantante dominicana Sonia Silvestre, una de las voces más importantes del país fallecida el sábado pasado a los 61 años víctima de complicaciones cerebrovasculares.
Silvestre, que en su momento de mayor esplendor decidió mermar su carrera para abrazar causas sociales y populares en su país, fue impedida por la muerte de volver a los estudios de grabación como tenía planificado, tras una última producción en 2007.
La carroza con los restos de la intérprete tardó más de una hora para ingresar al Cementerio Nacional, ubicado al norte de Santo Domingo, debido al taponamiento provocado por las decenas de vehículos que siguieron el cortejo.
También, decenas de personas fueron observadas saludando y aplaudiendo al paso de la carroza.
La cantante de éxitos como "La tarde está llorando", "El arañazo", "Yo quiero andar" o "Mi tercer amor", entre otros, estuvo en los últimos años desempeñando un rol diplomático en la embajada dominicana en Cuba, país con el que compartía su tiempo.
"El compromiso con su pueblo era su estrella. No se apartaba de esa esencia. La historia de la República Dominicana, las invasiones que sufrió, sus mártires, sus poetas preclaros articularon su equilibrio, como persona y como artista", dijo en una carta fechada ayer el cantautor cubano Silvio Rodríguez, gran amigo de la artista.
Rodríguez recordó en esa misiva, la hospitalidad que le brindó Sonia Silvestre cuando visitó el país a principios de los años 70, y las personas que presentó y con quienes desde entonces guarda una gran amistad.
"Aquella muchachita no parecía ser dueña de semejante voz. Uno se preguntaba de dónde salía tanta fuerza, tanta belleza poderosa. Pero no sólo cantando imponía respeto. También era admirable escucharle sus argumentos de granito", dijo sobre ella el autor de "Ojalá", que también fue un éxito en la voz de la cantante dominicana.
Antes del sepelio, el presidente dominicano, Danilo Medina, acudió a la funeraria donde velaban los restos de Sonia Silvestre y tras dar el pésame al esposo, hija y otros familiares.
"Es una pérdida irreparable y más para los que fuimos contemporáneos de Sonia, los que valoramos no solo su voz sino su compromiso, el que desde muy joven tuvo con la sociedad dominicana, siempre a la defensa de las mejores causas", dijo el jefe de Estado.
Hace pocos meses, la artista estuvo ingresada durante dos semanas producto de una seria enfermedad renal y una anemia aguda. Pudo restablecerse y hasta escribir en su cuenta de Twitter que se le había "escapado a la muerte".
Sin embargo, una recaída le sobrevino la semana pasada y tras tres días internado, sufrió un accidente cerebrovascular y dos infartos que causaron su deceso.
Sonia Silvestre fue una de las artistas más queridas y respetadas por los dominicanos no solo por sus excelentes cualidades vocales, sino porque siempre abrazó las causas más sentidas de los humildes y exigía con su voz y su presencia el respeto a los derechos humanos y a la libertad.
"Decía que su corazón latía dividido: una mitad en su 'Quisqueya' entrañable y la otra en su Cuba querida. Desde su primera visita (a Cuba) se integró a mi generación de trovadores y siempre la sentimos como nuestra (...) llevaba el mismo arte a los obreros de una fábrica o a los macheteros, en los campos de caña", dijo Silvio Rodríguez en una parte de su carta.
Fuente. Listín Diario