Dice algunos
que la juventud es un divino tesoro, y es cierto, pero de la forma en que estos jóvenes son
educado en el hogar, va a depender el producto de estos en la Sociedad.
Escribo
esto porque la mayorías de los robos y
actos de sangre que ocurre en nuestra Provincia y el País siempre hay envuelto jóvenes
de 18 a 25 años de edad, situación que duele hasta en la presencia de Dios.
El Distrito
Municipal de Jínova no escapa de esa realidad, en los últimos días se ha
desarrollado una ola de robo que han afectado instituciones deportivas y
religiosa.
En la
semana pasada antisociales sustralleron dos puertas al Play de este Distrito,
sin que hasta el momento se sepa quiénes fueron los que realizaron dicho acto de vandalismo.
En acto más
reciente fue el robo de que fuera objeto la Iglesia Cristiana de la Sección de Jaquimeyes
, donde se llevaron equipos eléctricos entre otros aspectos.
En tal
sentido llamamos a una mayor vigilancia policial en todo el Distrito municipal
de Jínova y todas sus Zonas aledañas.
Fortalecer con
más agentes el puesto policial del Distrito e inclusive dotarle de un motor para
un mejor servicio.
Si se crea
estas y otras medidas se le envía un
mensaje a la delincuencia de que la fuerza del orden esta de tras de ellos.
Esperamos que
aplique medidas para contrarrestar esta ola de robos en Jinova, por aquí se
aplica el refrán ¡Aquí nadie está
seguro!
por Fernando Castillo Ureña
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