El jefe de Estado expresó sus deseos para la familia dominicana, en compañía de su esposa, doña Cándida Montilla de Medina y de sus hijas Sibely, Vanessa y Ana Paula, en un mensaje dirigido a la nación.
“Esta es la noche del Niño que nació para salvar al mundo. Y de su familia terrenal, aquella que participó con él de esa tarea sagrada y gloriosa. Es, así, la más linda fiesta de amor y unión familiar”, destacó.
Reflexionó que las personas buscan más fuerza y esperanza, para continuar luchando por un mundo mejor, que comienza en la casa, en la familia.
“Sé que existe una persona, en cada país, que no tiene el derecho de colocar a su familia en primer lugar. Es el presidente o la presidenta de cualquier nación. Su compromiso debe ser pensar primero en su país, en su pueblo, y en la gran familia que formamos todos nosotros”, dijo el presidente.
“Estoy aquí, con mi familia, para desearles una Feliz Navidad, y también, para renovar nuestro compromiso de ser iguales a cualquier familia dominicana”, resaltó.
Medina manifestó a seguidas, “iguales en la fuerza, el coraje, la honestidad, la solidaridad y en la capacidad de luchar por un futuro mejor. Iguales en sueños y en esperanzas”.
Expresó su deseo de alcanzar el ideal de un país donde todos sean iguales en el deseo de que ningún niño nazca, en nuestro país, sin casa, sin comida, sin escuela, sin libros, sin futuro.
“Que no vea, jamás, a su papá rondando triste por la casa, porque no tiene empleo”, expresó.
Afirmó que desea un país donde un niño no vea, jamás, a su mamá llorar por el dolor físico de no tener un medicamento, o por el dolor espiritual de no tener esperanza.
“Candy, Sibely, Vanessa, Ana Paula y yo les deseamos una Feliz Navidad y un próspero año nuevo. Que Dios nos bendiga a todos!”, concluyó el mandatario.