Una riña entre dos jovencitas degeneró en una balacera la noche de este viernes en el sector de Los Solares de Milton, en Barahona, donde una mujer murió y al menos tres personas resultaron heridas, según reportes oficiales.
Víctor Urbáez (Alemán), oficial retirado de la Policía Nacional y padre de una de las jóvenes que protagonizaron el altercado habría intervenido, disparando contra los presentes con la pistola que portaba en su condición de oficial retirado, una Taurus, calibre nueve milímetros que se encuentra en poder de las autoridades. Se encuentra bajo arresto en la sede de la Dirección Regional Sur, en donde es investigado para ser sometido a la justicia.
La víctima fatal es Noemí Cornielle, de 44 años, quien, conforme al reporte policial recibió un balazo en abdomen y otro en el fémur. Murió mientras era atendida en el hospital Regional Universitario Jaime Mota, donde son atendidos los heridos, identificados como Josefa Piesar Montero, de 41 años, pareja del oficial retirado; Faricio Jiménez Corniell, de 20, y Pamela Jiménez Corniell, de 18, estos dos últimos hijos de la mujer asesinada.
Versiones recogidas en Los Solares de Milton indican que Pamela Jiménez Corniell, de 18 años; hija de la asesinada, y Guadalupe Urbáez Montero, hija del oficial retirado detenido por la muerte de Cornielle, desde hacía varias semanas mantenían una discusión, por razones que no fueron aclaradas.
Juan Carlos Luna Corniell, hijo de la mujer asesinada, lamentó que su madre muriera por lo que calificó como una tontería, y dijo esperar que la justicia castigue a su matador.
“Él la asesinó de una forma cobarde y ruin. Le pegó un primer disparo, pero luego le hizo otro ella ya en el suelo y no conforme le hizo un tercero como para asegurarse que la había asesinado”, dijo Luna Corniell.
Autoridades
Al lugar de la tragedia, un barrio pobre de este distrito municipal, se presentaron miembros de la policía, los departamentos de homicidios, Investigaciones Criminales, Policía Científica, un representante del Ministerio Público, así como el médico legista, doctor Miguel García Ortiz.
García Ortiz y la fiscalía ordenaron que el cadáver de la mujer fuera trasladado a la sede Regional del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, con asiento en Azua, para practicar la necropsia.
En tanto que cuatro agentes policiales, de la unidad conocida como “Los Bravos”, vigilan la residencia del oficial retirado a los fines de evitar que se ejerza cualquier tipo de violencia contra su casa.
Fuente:Listín Diario
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